El culo gordo de mi tia me vuelve loco
Es oír las palabras mágicas “culo gordo” y automáticamente ponerse a crecer nuestras pollas, mucho más cuando ese culo gordo pertenece a una mujer madura que sigue estando buena y activa sexualmente hablando. No puedo evitar sentir una terrible envidia cuando veo a tipos como este agarrarse al culazo de una madurita mientras le estira del hilillo del tanga sabiendo perfectamente que hará con ella lo que quiera porque la tiene en el bote. Efectivamente y aunque no os lo creáis, las maduras se enamoran rápido de los chicos jovencitos, aunque en el fondo saben que esos polvos espectaculares que echan tienen fecha de caducidad y lo suyo será una simple aventura pasajera. Pues lo que toca en estos casos es vivir con intensidad estos encuentros de incesto y centrarse en obtener todo el placer que sea posible, la vida es corta y está hecha de estos pequeños momentos que tan felices nos hacen…